jueves, 25 de abril de 2024

Purgatorio: la búsqueda de la purificación




Jon Sistiaga es un periodista, documentalista y escritor nacido en el país vasco en 1967.

Premio Ondas en 2012 y 2016, y premio Ortega y Gasset de Periodismo, Sistiaga ha cubierto conflictos y guerras en los Balcanes, Irak, Ruanda, Irlanda del Norte o Afganistán, entre otros muchos lugares.

Cubrió como periodista los peores años de la violencia en el País Vasco, entrevistó a talibanes afganos, miembros de ETA, guerrilleros de las FARC, narcos mexicanos, militantes del IRA, genocidas ruandeses o yihadistas de Al Qaeda, y a un sinfín de víctimas.

Sus documentales y artículos se han publicado en Telecinco, Cuatro, Canal+, CNN, El País o Movistar+.

En 2005 publicó en Plaza & Janés ¨Ninguna guerra se parece a otra¨, donde relata su experiencia en la guerra de Irak. ¨Purgatorio¨ es su primera novela.

Hace treinta y cinco años, Imanol Azkarate, empresario vasco y dueño de “Azkarate Logistics”, la mayor plataforma de distribución de bebidas y alimentos de la provincia, fue secuestrado y ejecutado por dos terroristas de la “Organización” que nunca fueron detenidos ni identificados por negarse a pagar el impuesto revolucionario a la banda.

Uno de los secuestradores fue Josu Etxebeste, propietario del restaurante Toki –Eder. Desde el día de la ejecución de Imanol Azkarate, Josu Etxebeste ha vivido con el peso de la culpa de la injusticia que cometió y del daño que le ocasionó a Alasne, única hija de. Ahora, Josu está convencido y decidido a confesar el crimen que cometió y está dispuesto a entregar a Alasne las cartas que escribió Imanol Azkárate para su hija, y que contraviniendo las órdenes de la Organización, Josu escondió y guardó tras su cautiverio y asesinato.

Jose Etxebeste está decidido a confesar el crimen que cometió y a entregarse como ejecutor material del asesinato de Imanol Azkárate pero sabe que su confesión hará saltar las alarmas entre antiguos miembros de la banda y agitará los resortes durmientes de la Organización. Josu, para confesar, exigirá que el comisario Ignacio Sánchez reconozca que en el pasado fue un despiadado torturador que lo sometió a impensables vejaciones él a a los sospechosos de pertenecer a la Organización .

Para ejecutar su plan, Josu escribe y manda tres cartas. La primera de ellas se la envía al comisario Ignacio Sánchez, principal encargado de investigar el secuestro del empresario vasco y quien durante la investigación torturó durante semanas a Etxebeste sin conseguir que hablara. Alasne, hija de Azkarate, recibe la segunda carta con el resto de notas y dibujos de su padre. El destinatario de la tercera carta es Zigor Altuna, alias Beltza, ex militante, reputado abogado de éxito que, treinta y cinco años antes, fue el otro miembro del comando que secuestró y ejecutó al empresario. Al contrario que Josu, Zigor nunca se ha sentido culpable y no está dispuesto a permitir que la confesión de Josu tire por tierra y hunda la vida de lujos y comodidades que lleva ahora.

Así pues, con la decisión de Josú pondrá en jaque tanto al resto de involucrados en el secuestro de Imanol Azkarate como a los policías que brutalmente torturaron a Josu Etxebeste en el pasado. Únicamente Alasne tiene necesidad e interés de que todo salga a la luz y descubrir por fin que fue lo que le pasó a su padre.

Las culpas no se entierran ni se esconden, sino que afloran y se reconocen. Una tierra sembrada de armas oxidadas en zulos ( lugar oculto y cerrado dispuesto para esconder ilegalmente cosas o personas secuestradas) abandonados, de traiciones, lealtades y secretos atroces, de guerrilleros arrepentidos, guerrilleros orgullosos y victimas que no pueden cerrar su duelo.

“Purgatorio” es una magnífica novela contada y narrada de forma tal que el lector queda atrapado desde sus primeras páginas y donde encontrará dosis de novela negra, thriller, misterio, investigación y suspense que te mantiene en vilo hasta la última página.

La vida profesional de Sistiaga lo ha llevado a los escenarios donde se desarrollaron las guerras y genocidios de los últimos treinta años a lo largo del mundo, su obra como documentalista a los lugares y personas que pocos acceden y fundamentalmente a la razón de escribir ¨Purgatorio¨.

Y allí aparece un fenómeno común a todos los periodistas cuando su vida profesional los ha llevado a completar cientos de libretas con palabras de victimas y victimarios. Los hechos retratados son tan duros y tan dolorosos, como imposibles de ser publicados porque no hay forma de probarlos de modo tal de no tener que vivir en los tribunales abonando millonarias demandas.

La literatura puede llegar donde el periodismo tiene el terreno vedado.



Llegué a ¨Purgatorio¨, después escucharlo en dos extensos reportajes que se encuentran subidos a Youtube. Uno realizado por Jano Garcia, en su canal “En Libertad¨ y el otro por Jordi Wild en su canal ¨The Wild Project¨.

En ellos Sistiaga verbaliza los borradores de ¨Purgatorio¨ . Afirma, con cruda lucidez, que el único lugar que no se elige es el lugar de victima. Se es puesto allí por voluntad de otro, aquel que tomó la decisión de poner la bomba, el que decidió hacerle perder la humanidad bajo la mesa de tortura. Para las victimas, solo quedan el dolor de sus familias y unas pocos fotos de otras épocas

Describe la sencillez del proceso de incorporación a organizaciones de cualquier tipo y el camino de traspasar una a una las lineas rojas , vinculadas a la lucha armada o no, vinculadas a procesos revolucionarios o no; con sorprendentes reacciones de quienes pudieron haber participado en algunas de ellas. Dudas? Ninguna.

La reafirmación de todo a libro cerrado no  interpela en absoluto sus principios, los exculpa de todo, y de una u otra manera; reafirma, consolida sus lugares en el ecosistema ideológico.

En este escenario, que al entender de Sistiaga conforma un estado de dulce amnesia colectiva, hay mucha gente que no ha pagado, y muchas otras niegan haber estado en los escenarios. Y siempre siguen allí, en las universidades, en los estudios juridicos, en los sets de televisión, en los parlamentos y paradójicamente en grandes corporaciones económicas consolidadas a través múltiples recursos y principios, muchos de los cuales son aborrecibles.

En el reportaje dado a Jano García, Sistiaga describe coloquialmente un proceso de reclutamiento a organizaciones que es difícilmente se pueda diferenciar a los largo de los continentes:

¨- Es que tu tienes algo especial..., vente con nosotros a una marcha al monte¨

Tenemos un asamblea¨ , le haces hablar.

Le pones en primer lugar en la manifestación.

Le das un día una piedra o un cóctel molotov,

¨- Tu tiene lo que hay que tener , gente como tú es la que se necesita...-¨

Este señor que te lo dice, te deja luego ahí y se va comer mariscos.

Estos métodos de captación son muy básicos , tan iguales y tan simples

Todas las culturas contemplan el NO matarás. Y que ha pasado? Les han convencido que es necesario saltar ese mandamiento. Hay que matar hoy, para poder dejar de matar en el futuro o para que no nos maten.

Les han convencido que hay una violencia necesaria, hay una violencia virtuosa. Hay una violencia que se contrapone a la violencias mala que es, la de los otros. La opresora , la que no nos deja ser nación, musulmanes, hutus, de derechas o de izquierdas. La violencia de los otros es mala, pero la de nuestra... es buena.

Es el inicio de un camino en el que vas traspasando sucesivamente lineas rojas....

Desde el primer comunicado que dice ¨Fundamos una organización para la liberación de...¨

Al segundo comunicado donde tienes que aceptar el que has matado a alguien....,asumir una muerte, justificarla.

La tercera cuando tienes que asumir la muerte de un civil. ¨Pasaba por ahí, chivato¨

Cuarta cuando empiezas a matar a niños. ¨Porque Pateó sin querer una bomba, o porque pasaban por ahí¨

Tu idea inicial muy pura que sea , está marcada. No hay nada que pueda crecer sano, si se riega con sangre.

¨Purgatorio¨, vale la pena







 

lunes, 12 de febrero de 2024

Ultimo intento

Salvo dos o tres post políticos, escritos a modo desesperado; este blog no ha tenido actividad durante casi dos años.
Un soporte obsoleto como el blog, navega en la indiferencia de los navegantes. Porque las redes lo han superado infinitamente, porque la velocidad de los tiempos no llaman a leer más de cinco líneas, porque la imagen supera la palabra y porque nadie quiere tener la sensación de que puede estar perdiendo el tiempo.
Ante este panorama eran tres las opciones posibles: cerrar este blog, dejarlo flotar como parte de la basura espacial al cual alguien dará un link o volver al darle impulso.
La decisión es la última, que es la mejor forma que siento para terminar de escribir los días. Los que han pasado (los más) y los que restan para tratar de dar testimonio de ellos.
Ojalá que la decisión sea la acertada.