jueves, 29 de julio de 2010

Mentiras y traiciones en el puti club


La novela maradoniana (episodio mundialista) parece haber llegado a su fin. Mentiras, traiciones, escandalos ... una ensalada a la que no le falta ningun ingrediente. Diego en conferencia de prensa en un ícono menemista recibiendo el apoyo de Cristina. Grondona haciendo el papel de Poncio Pilatos diciendo yo no lo eche. Bilardo haciendose el hermano mayor, se pregunta en que lo traicioné. Todos como si fueran angelitos en un cabaret. Podía pasar otra cosa? Si el resultado de aquel sabado hubiera sido otro, seguramente Diego hubiera asegurado su categoría de Dios, Grondona sería el dirigente más astuto del futbol y Bilardo una mago de la estrategia, el periodismo hablaría maravillas del futbol argentino, y el poder politico hubiera erigido a Maradona como un referente social merecedor de alguna candidatura. Pero no..., y citando una frase escrita en el Diario Perfil "Messi no es Maradona, Maradona no es Dios y Dios no es argentino", el tres de julio se juntaron los alemanes, nuestra falta de mediocampo, el Pulpo, y la triste conclusión que el futbol que le gusta a la gente puede ser cualquier otro con tal que gane.
Culpas? Poco para reprochar , el Diego no es mejor ni peor, el Diego ES (cual es la sorpresa ante ello?) y en gran parte nosotros lo hicimos. Lo hicimos pasión y bandera, simbolo, general de varios ejercitos de impresentables, referente indiscutible de nuestras virtudes y defectos. Perdimos el sentido de la ubicación...Diego estaba en la cancha; pero del otro lado de la línea. No podia aportar su temple y su coraje a los que estaban adentro, su magia no es transmisible y su talento esta reservados para pocos en el Olimpo. Grondona ha sido siempre así, te ningunea, te usa, se te cuelga del saco y cuando caíste en desgracia te pega un boleo en el culo, de socio eterno de TyC a padre del futbol para todos. Y nosotros? por ahí, haciendonos los boludos. Gritando como desaforados el Gol de Palermo en el diluvio de Nuñez y puteando en arameo el seis a cero con Bolivia, festejando el gol en offside de Tevez con Mexico y maldiciendo nuestro destino ante los toques alemanes hasta el fondo del area.
Es el futbol para nosotros solo un deporte? Pareciera que no, aunque suene politicamente correcto afirmarlo. Y no lo es porque no tuvimos palabras para contener las lagrimas de Fran y de Saverio, que con su menos de diez no encontraban respuestas a lo que estaban viendo. No lo es porque hacemos desarrollos filosoficos en donde Sarte juega de nueve , ponemos a la patria en la cancha, decimos que se vive como se juega, citamos a la cabalas de mexico, y a las horas de los partidos mejor que no se te ocurriera enfermarte, quedarte sin fasos, o tener una consulta urgente porque solo el contestador telefonico de Dios te contestaba.
Solo nos queda esperar hasta la proxima traición y que una bella mentira nos haga campeones del mundo.

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